viernes, 18 de febrero de 2011

Al mirar, oír, tocar o ayudar al hijo a hacer esto o aquello, nos mantenemos alertas, quietos, completamente presentes, no deseamos otra cosa que no sea ese momento, tal y como es. Es así como abrimos espacio para el Ser. En ese momento, estando presentes, dejamos de ser el padre o madre. Somos la conciencia, la quietud, la Presencia que oye, mira, toca y habla. Somos el Ser detrás de la acción.

jueves, 17 de febrero de 2011

Lo que no se puede responder

He hecho circular gran número de cartas que he escrito, ya que se ha considerado de gran interés, y el resultado ha sido que hemos recibido numerosas estimaciones favorables.
Puede que ahora sea interesante ver una carta típica del género que yo no puedo responder. Este es un tipo de carta muy común, cada semana docenas de ellas contienen una o más de las frases que distinguen a esta:

“Quiero integrarme con el mundo real; desarrollar mi potencial, encontrar lo que se ha perdido en mi vida, ver y sentir las cosas más objetivamente; tendré que apartarme del contexto que mi país, mis padres y mi cultura me han impuesto. Siento que todos nosotros hemos abandonado el orden natural, y debemos reencontrarlo…Busco una espiritualización de lo material, y mejorar la vida restrictiva en la que me hallo…”

Cuando te encuentras con individuos que escriben así, descubres que esta incoherencia siempre enmascara un desarrollo excesivo de las virtudes que la actividad sufí busca reducir, así como una casi total ausencia de aquellas cosas que la acción sufí busca desarrollar.
Este es el verdadero dominio del estudio y desarrollo. Mientras tanto, utilizando la tendencia actual a la falsificación, si escribes o hablas como la persona que he mencionado en el párrafo anterior, la dejaras satisfecha e impresionada, incluso aunque tan solo estés retroalimentándola con sus propias incoherencias ,
parafraseadas ligeramente.
Si no lo crees, te invito a intentarlo, ya que no solo nadie intentara impedírtelo, sino que harás muchos más a amigos, si puedes soportarlos. Si puedes soportarlos, deberías haber estado hablando así desde el principio.

lunes, 14 de febrero de 2011



Nuevos tiempos se avecinan no, los nuevos tiempos ya están.

Las múltiples ideas, movimientos, personas que están haciendo de este mundo algo distinto me lleva a pensar que los cambios son mucho más rápidos que en otras épocas y muchas veces pienso que no puedo llegar, que me falta aire, paren un poco, pienso, pero no, el mundo sigue su rumbo y así tiene que ser, me tengo que acomodar a los nuevos tiempos, a esas nuevas ideas, a nuevos pensamientos, tengo que hacerlo, no puedo ni quiero quedarme siendo la ultima de la fila, tampoco correr una carrera sin sentido y avasallar a quien no corra a mi misma velocidad, es simple creo, cada uno a su manera, a su ritmo deberá adentrarse en las nuevas ideas, porque debajo de esas nuevas ideas siguen las otras, siguen los problemas básicos de la gente, nada es mágico ni se arregla con una varita mágica, a veces cuando se da un paso parece que son 20 y a veces parece que se retrocede, como el mar, como el viento, como la vida misma.
El mundo se divide en dos, los que ven esos cambios y los acepan y ayudan a que esos cambios se desarrollen y los que también los ven pero no los aceptan y quieren seguir en la misma
Estela