sábado, 5 de septiembre de 2009

“Estar juntos”

Nada resalta tanto el carácter no espiritual, sino muy social, de muchas relaciones personales, como la necesidad de contacto, asociación, relación. La gente siente que debería estar cerca de alguien imbuido de sanidad, que debería impartir su bendición a otros, que algún tipo de contacto frecuente o constante tiene alguna dimensión espiritual.
El hecho, por supuesto, es que existen momento y lugares donde para las personas con intereses espirituales mutuos es más importante estar separadas que juntas. Quienes comprenden esto y lo han experimentado son las personas espirituales. Quienes no lo han hecho son parte de un fenómeno sociológico: el instinto gregario.
El origen de este deseo de ir juntos en grupo no es difícil de encontrar. Aquellos que conducen a la manada se sienten desplazados: tienen dudas e incomodidad cuando no se encuentran en contacto con personas de mentalidad similar.
Quienes se congregan por cuenta de los “pastores” se encuentran igualmente desplazados. Pero, en su caso, hay más esperanza de que se les pueda llevar a una posición donde ya no dependan de otros; donde su falta de adecuación se cure, en vez de reafirmarse mediante la conducta de rebaño.
Idries Shah