martes, 17 de febrero de 2009

Experiencias visionarias

Déjenme expresarles, mi opinión, muy rapidamente, sobre lo que se podría llamar visiones o experiencias visionarias.
Si una persona, (un paciente) tiene una experiencia visual o de un sueño particularmente vívida, y si es cierto que hay tanto recuerdo como se supone, debería ser examinada con mucho detalle.
Ciertamente, se han escrito volúmenes y volúmenes sobre cómo interpretar sueños según Freud, Jung y todos los demás, que se adentran en todas las formas posibles de ver los sueños. Pero, el primer examen de una experiencia visual o de un sueño debería ser no exactamente hostil, sino con una actitud crítica y dubitativa. Si pueden ignorar o descartar el sueño basándose en ese examen, háganlo. "Fue el queso que comí en la cena", o, "Tal vez fue el funeral al que fui", o algo así. Si pasa la fase inicial de duda ("Fue algo que comí ayer. Sí"), entonces, lo pueden examinar de otra manera.
En relación al tema hay, como de costumbre, un cuento de Nasrudín sobre sueños.

Estaba viajando, con un compañero, a través del desierto de Gobi, y hacia mucho calor; andaban muy escasos de agua, hasta que llegó el momento en que solamente les quedó una botella de agua. Ambos estaban terriblemente sedientos, tenian las bocas secas y estaban casi alucinando. Entonces, decidieron irse a dormir muy pronto, levantarse muy temprano a la mañana y compartir al día siguiente la última botella de agua antes de intentar llegar al próximo oasis.
Ambos se despertaron temprano a la mañana siguiente y el compañero de Nasrudín descubrió que la botella estaba vacía. Como tenía la garganta tan seca, le graznó a Nasrudín:
- ¿Por qué terminaste el agua? ¿Cómo pudiste hacer algo así?
Nasrudín dijo:
- Tú no sabes que ambos somos derviches, y que hemos jurado seguir las órdenes de nuestros maestros. Anoche tuve un sueño. En esta visión, Mevlana Rumi me dijo: "Nasrudín, bebe tu agua, toma tu parte ahora".
Entonces, el otro derviche le dijo:
- Sí, pero él dijo, bebe tu parte, tu porción del agua... ¿Por qué terminaste toda la botella?
Y Nasrudín dijo:
- Bueno, es obvio, mi parte era la mitad inferior de la botella.

Omar Ali Shah