martes, 14 de abril de 2009

Escogiendo un nuevo maestro

P: El Gran Sheikh (Ibn el Arabi) ha dicho, pienso que de modo bastante brusco, que un discípulo que adopta otro maestro cuando el suyo está vivo no puede ser un discípulo, y traiciona su confianza.

R: Como otros sufíes, Ibn el Arabi no esta siendo brusco ni apacible: la tarea del sufi es ser descriptivo y ejercer o provocar el ejercicio de la enseñanza. Si pones el asunto en otros términos, quizás no puedas comprender la respuesta, aunque espero que si.
“Brusquedad” o “afabilidad” es como la gente ve las cosas desde un punto de vista subjetivo.
Por definición, tu maestro puede enseñarte y lo hace. ¿Cuál es el propósito de otro maestro? Por decirlo de algún modo, no puedes comer dos comidas al mismo tiempo. Un “discípulo” que va de un maestro a otro no es un discípulo; y alguien que le “enseña” en tales circunstancias no es un maestro. Esta es la realidad sufí en este asunto.
Si estás pensando en algún otro tipo de aprendizaje o enseñanza – un poco de aquí y un poco de allá- no estas hablando del camino sufi. No obstante, puede que hayas caído en la confusión habitual entre lo que quieres y lo que no quieres, buscando placer y evitando molestias. Esto no es consistente con el sufismo.
Idries Shah