miércoles, 24 de noviembre de 2010

El secreto

El rey Tashak de Persia revelo una vez a sus esclavos un secreto y añadió:
- A nadie se lo contéis.
Estos lo mantuvieron durante todo un año y, al fin, lo revelaron. El secreto se extendió como una marea por el reino y así todo el mundo lo conoció.
Furioso el rey encadeno a los esclavos y los envió al verdugo.
- Cortadles la cabeza – ordenó
- Piedad – exclamó uno de los esclavos- No nos matéis por culpa de vuestro propio delito.
- ¿Cómo es eso? – inquirió el rey.
- ¿Acaso esta marea que intentáis detener – respondió el esclavo – no era más que una sencilla gota que sola moraba en vuestro corazón?